José Luis Tapia Rocha, economista, Director Fundador del Instituto de Libre Empresa, Presidente del Movimiento 5 Reformas y Catedrático de Economía Política.
La propuesta de reforma del sistema de pensiones es un tema que despierta emociones y opiniones encontradas, especialmente desde una perspectiva liberal clásica. Desde esta óptica, se considera que el respeto a la propiedad privada y la libertad individual son pilares fundamentales de una sociedad próspera y justa. La idea de establecer un fondo solidario financiado por los dueños de las cuentas individuales de las AFP se percibe como una violación directa de estos principios.
En primer lugar, debemos entender que las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) fueron creadas con el propósito de brindar a los trabajadores una alternativa mejor al sistema de pensiones estatal, conocido como la Oficina de Normalización Previsional (ONP). La idea era otorgar mayor autonomía y control sobre los ahorros para el retiro, permitiendo a cada individuo tomar decisiones sobre su futuro financiero. Intervenir en estos fondos individuales de manera compulsiva y redistributiva va en contra de los principios de libre mercado y propiedad privada. Esta propuesta viene de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico bajo la fórmula expropiatioria de complementación y combinación del sistema estatal y privada de pensiones.
Expropiación
La expropiación disfrazada de solidaridad no solo atenta contra la propiedad privada, sino que también socava la responsabilidad individual. La idea de que aquellos que no contribuyeron lo suficiente para tener una pensión digna puedan beneficiarse a expensas de los ahorros de otros es profundamente injusta. En una sociedad libre, cada individuo es responsable de su propio bienestar financiero y debe asumir las consecuencias de sus decisiones.
Es crucial destacar que las soluciones basadas en la intervención estatal suelen generar más problemas de los que resuelven. El camino hacia una verdadera seguridad financiera en la jubilación no radica en aumentar el control y la injerencia del gobierno, sino en promover la libertad y la competencia en el mercado de pensiones. Un Mercado Libre de pensiones, donde los individuos tengan la libertad de elegir entre diferentes opciones de inversión y administración, es la verdadera solución a los problemas del sistema actual. Pero esta reforma pensionaria debe ir acompañada de la reforma politica, económica, educativa y salud para cambiar todo el sistema.
La propuesta de Fuerza Popular de reformar totalmente el sistema de pensiones, creando un Sistema Integral Previsional Peruano (SIPP), también merece un análisis crítico desde una perspectiva liberal clásica. Si bien la idea de unificar el sistema de pensiones puede parecer atractiva en principio, es importante tener en cuenta que la consolidación bajo administración pública y privada no garantiza una mayor eficiencia ni una mejor protección para los ciudadanos. Todo lo contrario, es una amenaza a la propiedad privada de las cuentas individuales que tienen los afiliados en las AFPs.
Por otro lado, la propuesta de Podemos Perú de renovar el sistema de pensiones, incluyendo tanto a las AFP como a la ONP, plantea nuevos desafíos y oportunidades. Sin embargo, cualquier reforma que se base en la intervención estatal corre el riesgo de perpetuar los problemas del sistema actual y limitar la libertad individual. Tampoco es la salida.
En resumen, la propuesta de reforma del sistema de pensiones plantea importantes desafíos desde una perspectiva liberal clásica. La expropiación disfrazada de solidaridad y la intervención estatal son contrarias a los principios fundamentales de libertad individual y propiedad privada. La verdadera solución radica en promover un Mercado Libre de pensiones, libre de sistemas, donde cada individuo tenga el control total de su futuro financiero y pueda tomar decisiones informadas sobre su jubilación.
